Close to the Sun – Análisis

Close to the Sun es una exclusiva de la Epic Store, un nuevo indie de suspenso con mucha atmósfera, una pizca de rompecabezas, y una narrativa interesante, además de bonita, con suficiente drama para estar siempre alertas, expectantes bajo la tela que teje una cuento seductor. Con un marcado estilo escénico a lo Bioshock e incluso el mismo Fallout 4, esta nueva entrega de Storm in a Teacup llega con bombos y platillos, pero a veces sentimos que se torna mucho en un walking simulator en lugar de ir por el camino que profesa.

Hablando un poco sobre su trama, Close to the Sun se sitúa en los tiempos donde la guerra entre Nicola Tesla y Thomas Edison tocaba su techo. La historia nos lleva casi al fin del siglo XIX, donde un enorme navío liderado por el mismo Tesla fue destinado a la investigación científica. Pero algunos experimentos se salieron de control, generando una distorsión del tiempo y el espacio, creando un problema casi irreparable, con consecuencias nefastas para la tripulación. La curiosidad humana a veces sobrepasa los limites de lo incomprensible, causando situaciones en parte irremediables; y eso, lo aprenderemos en Close to the Sun. Ahí es donde entra Rose, nuestra protagonista, quien va en busca de su hermana Ada a bordo del barco.

Con el nombre de El Helios, este barco es tan gigantesco que se divide en distritos, su envergadura es tal, que tiene su propia estación de trenes, hay parques, bares, restaurantes; es literalmente, una ciudad flotante. Al inicio del juego llegamos en una embarcación a las puertas del Helios, y aunque desde fuera se ve gigante, no es hasta entrar que nos damos cuenta de su tamaño. No solo de la magnitud del barco, sino de la escala del ego del Nicola Tesla recreado para esta obra jugable; por todos lados hay posters con su imagen, estatuas de Tesla, hasta un museo para el inventor se encuentra dentro de esre barco que se supone es de mera investigación. Para mí, mucho del tamaño es para enaltecerse a sí mismo, y vaya que impresiona.

La jugabilidad nos lleva a caminar para encontrar objetos coleccionables, o a veces nos toca buscar la respuesta a acertijos en cuartos o habitaciones pequeñas, por lo que dar con la respuesta y resolverlos no es algo complicado, es un juego lineal. Otras veces hay que ir del punto A al punto B, encontrar un objeto, y usarlo para abrir una puerta. Tenemos presente un elemento mínimo de sigilo pero es algo fugaz, simplemente debemos evitar toparnos con un loco que lleva un cuchillo, pero es tan fácil como ir en la dirección contraria y listo. Toparemos con momentos donde se debe correr por nuestra vida, ya sea porque nos persiguen, o por una situación del entorno la cual amerita un flujo intenso de adrenalina. Siento que estoy ante un juego más parecido a Firewatch, y no en uno de horror (así lo cataloga su desarrollador).

Todo lo anterior lo hacemos mediante un sistema de controles super fácil. No hay mecánicas de dash, ni formas de observar a hurtadillas por la rendija de una puerta. Los stick cumplen su trabajo usual de movilidad, podemos brincar con el A, e interactuar con los objetos presionando la X (recoger llaves, abrir puertas); podemos jugarlo con teclado/ratón si es nuestro gusto.

Y en lo simple de las mecánicas, entiendo las limitantes, Rose es una simple mortal, solo viene por las ganas de saber sobre el bienestar de su hermana, Rose quiere verla después de algún tiempo sin estar juntas. Es físicamente débil, pero mentalmente audaz, pícara, de temperamento fuerte, no se detendrá hasta dar con Ada.

En lo narrativo, de verdad me creo el personaje de Rose (igual con Ada, y el del loco habla por radio de vez en cuando), el trabajo en la narrativa es genial, e incluso doblado a Español siento formar parte de la historia, me meto de lleno en la aventura. El problema es cuando esta sensación dura únicamente el tiempo que tardan los eventos del guión y que dan rienda a la trama, ¿Por qué? Porque todo lo del medio a veces se siente muy lento. La ciudad dentro del Helios es tan grande que a veces me aburro yendo de aquí para allá, pasan pocas cosas interesantes en estos lapsos, excepto cuando estoy escapando de los peligros , pero después de eso, mi único escape a dicho letargo son las charlas entre los personajes.

Pero aún con estas caídas de emoción, Close to the Sun logra mantenerme activo mentalmente con su hermosa arquitectura. Admiro los detalles puestos en el diseño del barco, extrañamente siento como si caminara por el Titanic, y recuerdo con cariño el tiempo pasado en el yelmo de Fallout 4, sobre todo cuando entro a uno de los bares mientras suena alguna pista de aquella época, me recuerda mis andanzas en el juego de Bethesda, y se siente realmente bien.

El tema del apartado técnico ha de ser comentado, en varias partidas se presentaron crasheos (problemas) del juego, sobre todo al inicio del capítulo 3, donde un error extraño hizo «explotar» el juego y nos vimos en la necesidad de verificar el caché del mismo en el ciente de Epic, el cual a su vez, tuvo que volver a descargar los 20GB necesarios para instalar Close to the Sun. No sabemos qué paso, pero eso arregló los problemas.

Se notaron igualmente, muchas áreas con bajadas de FPS, bajan mucho durante las escenas de persecuciones donde tenemos que escapar, y son muy molestos. Esto necesita pulido, pues no es posible que se den dichas fluctuaciones de cuadros por segundo en un juego donde casi el 90% de los elementos están estáticos y muy pocas cosas se mueven. Pero como la tendencia general hoy en día es ver esto como aceptable, imaginamos que es «normal», y que «con un par de parches se arreglará».

Otro detalle que me sacó mucho de la inmersión es que cuando somos perseguidos y nos toca correr para salvarnos, a veces no funciona la mecánica de pasar sobre obstáculos al presionar el botón X, por lo que terminamos siendo asesinados sin ser culpa nuestra.

Close to the Sun tiene muchos aciertos, resaltando en el entorno tan increíble que logra cuajar con sus visuales tan hermosas junto a un escenario fantástico, lástima los pequeños detalles técnicos los cuales nos sacan del libreto. Esos detalles pueden eliminarse con algo de trabajo de reparaciones, esperamos que Storm in a Teacup ponga manos a la obra en realizar las correcciones necesarias.

Completar el juego en su totalidad no llevará más de 7 horas. Pero el final del mismo deja abierto un posible regreso de la IP, o da cabida al chance de algún DLC en unos meses. Yo la pasé muy bien y estoy expectante de saber qué será lo siguiente en el trecho abierto el cual Close to the Sun con su interesante final y con el aliado inesperado nos dejó.

En la Epic Store podemos encontrar a Close to the Sun a un precio de $20 USD, nada mal para el contenido que ofrece. Aquellos quienes quieran hacerse con él en otras tiendas, deberán esperar un año. Los jugadores que tengan consola, pueden disfrutarlo en PlayStation 4 y Xbox One.