Pongase la capa y los calzoncillos por fuera, que rompiendo paredes de género y desafiando paradigmas de entretenimiento llegará mañana a la pantalla de su computadora la nueva megaproducción de superhéroes de Netflix, Jessica Jones. Y yo, como tantos otros poco entendidos del mundo de los cómics nos preguntamos: “Qué bien, pero, ¿quién carajos es ella y dónde está mi segunda temporada de Daredevil?”. Pero calma, que esto y más será explicado.

Para los que no lo sabían, Netflix anunció a mediados de este año que cada seis meses lanzará una nueva serie basada en algún superhéroe del universo de Marvel, luego del gran éxito que recibió su producción original de Daredevil, la cual replanteó al icónico personaje de Daredevil para darle nueva vida en la pantalla luego del malogrado intento de Ben Affleck del cual no diremos nada más y seguiremos pretendiendo que nunca ocurrió. ¿Listo? Ok, sigamos. Luego de una exhaustiva y minuciosa investigación pude determinar que Jessica Jones es, en efecto, una mujer… Y que es una de las series de superhéroes con una de las temáticas más oscuras que he visto. Mentalmente desgastante y llena de momentos que dejan a los personajes rotos por dentro (¡YAY! por el sufrimiento metafísico :D).

Para ubicarla dentro de los comics, Jessica tiene extrañas y numerosas conexiones con otros superhéroes del universo de Marvel. Estuvo presente cuando el incidente que transforma a Peter Parker (ella tenía un crush por él) y su papá trabajaba para Tony Stark, el cual le regaló una entradas para Disneyland, y es durante este viaje cuando el carro de la familia de Jessica tiene un accidente con un camión de químicos en el cual muere su familia y la deja a ella en un coma del cual despierta con superpoderes, todo bien original hasta ahora. Más adelante en su vida se reencuentra con Peter Parker, ya convertido en Spiderman y presencia una lucha entre este y Sandman lo cual la motiva a usar sus poderes para el bien.

Todo muy rutinario hasta ahora, y en general, la vida de Jessica, quien adopta la persona de Jewel como su alter ego, se podría llamar bastante rutinaria para la de un superhéroe. Pero es en este punto donde la historia se hace interesante y adquiere un nuevo tono cuando Jewel atiende el llamado de la justicia a una situación que ocurre dentro de un restaurante. Donde tiene su primer encuentro con Zebediah Killgrave, también conocido como The Purple Man, uno de los enemigos más conocidos de Daredevil, o eso me dice wikipedia porque tampoco lo conocía. El superpoder de Killgrave consiste en dominar la voluntad de otros, no a lo Profesor Xavier pero parecido.

Luego de este encuentro la vida de Jessica no será la misma y esa rutinaria existencia se convertirá en algo más cercano a un infierno en vida. No quiero hacer spoilers pero nada más digamos que se da una lucha de voluntades entre ella y Killgrave, con consecuencias bastante nocivas para malas para la joven Jessica quien de repente ve cómo poco a poco va perdiendo el control de todo a su alrededor.

Es aquí donde me emociona que sea Netflix quien tomara la batuta de este nuevo proyecto y esta es la razón: Netflix tiene un historial de tomar riesgos en cuanto a sus producciones, ya sea por sus temáticas sociales o políticas, o al tomar una franquicia como Daredevil para revigorizar en un mejor producto. Los temas, la violencia, el sexo, la maldad interna; todos son elementos que se ubican y dan forma a este mundo de Jessica Jones. Todos estos elementos familiares para las producciones de Netflix, los cuales no dudan en utilizar. Y seguramente, como sobre tantos otros temas, veremos un nuevo aproximamiento a la idea de ser una superheroína.

Así que ya lo saben, si se preguntan qué nueva serie comenzar a seguir o si solamente les da curiosidad, mañana tienen la oportunidad de ver la que probablemente será de las mejores producciones del año. Ya no tienen como excusa el no saber que C@#&*s es Jessica Jones.

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