Quizá algunos de los que lean esto no vivieron en la época donde en la televisión solo se vivía el ideal europeo, rubios y rubias heterosexuales de hermoso cuerpo, y todos los demás se reducían a estereotipos, el negro ladrón, el latino drogadicto, el judío avaro, el nativo americano con plumas haciendo señales de humo, el gay extremadamente afeminando, la mujer ama de casa, la gorda cuyo chiste era que solo pensaba en comer, etc. Esas eran las películas y series de los 90s para atrás, obviamente había excepciones pero la regla eran estereotipos de minorías para generar comedia.
¿Ahora bien, porque saco el tema? verán, en los últimos años se ha tratado de hacer mayor inclusión en los medios (lo cual es excelente), sin embargo no soy el único quien ha notado que dichas inclusiones no son siempre para incluir personas con condiciones especiales o minorías sino para generar controversia y trafico sobre su serie o película sin importarles el resultado final, me explico: la inclusión no debe ser incluir un grupo y hacerlo resaltar, inclusión es tomar ese grupo, meterlo en el mundo y que la gente lo vea encajar perfectamente como algo normal.
Durante años no veía una serie que hiciera algo así, sin embargo, al fin hay una que trata la inclusión con respeto y la cual quiero recomendar fervientemente, esta serie es The Dragon Prince, o El Príncipe Dragón la cual se encuentra disponible en Netflix.
Ahora bien, ¿qué hace esta serie bien que le falta a las demás?, simple: naturalidad. Desde el principio de la serie el rey es de piel oscura y las mujeres ostentan también cargos de poder como lo más normal del mundo, más adelante nos enteramos que la tía de los protagonista es sordomuda, pero no nos dan un discurso barato de aceptación, lo muestran, muestran el respeto que le tienen sus soldados y como algunos hasta aprendieron lenguaje de señas, nos muestra la valiente guerrera y experimentada soldado que es, tiene una posición de poder, es mujer y además con problemas auditivos; cuando una persona con caracterizas similares vea este personaje se podrá identificar y tener una sonrisa en el rostro. Otro ejemplos son las Reinas de Duren quienes son pareja, nadie las juzga, se ve en esa cultura como algo normal, como su decisión, no se siente forzado, son dos personas queriendo estar juntas y a la serie ni a los personajes en ella les importa que sean chicas, es solo amor y así lo muestra la serie cuando su hija llora tras escuchar una historia sobre ellas. También, el capitán ciego, un hombre que aprendió a sentir el viento y a oler la tierra. Como estos hay muchos más ejemplos, pero no me quiero extender más porque de verdad me gustaría que la experimenten encontrándose con un mundo de fantasía y magia espectacular.
Para concluir es bastante hermoso el hecho que todo esto se haga al lado de una historia interesante y personajes complejos, da gusto encontrarse con historias que no temen demostrar un amplio abanico de gustos y colores para que las nuevas generaciones no encuentren la diversidad como algo negativo o invasivo y espero fervientemente que otras propiedades sigan este ejemplo y creen obras capaces de igualar y mejorar esta propuesta
Me despido esperando que disfruten de The Dragon Prince y muchas gracias por leer.