Desperados es una saga casi venteañera, tiene sus inicios en el año 2001 con el primer título de la serie llamado Desperados: Wanted Dead or Alive, luego vendrían dos juego más en 2006 y 2007. Eso nos deja con una larga espera de trece años para por fin tener otra entrada de la IP ambientada en el viejo oeste, Desperados III llegó ya al PC, PlayStation 4, y Xbox One, tristemente, no lo tenemos en Switch debido a sus requerimientos mínimos.
Sus principales características son el juego orientado al sigilo, y el uso de habilidades de los personajes para completar niveles repletos de enemigos, con diseños impecables en los entornos, en los que se nos dan hasta dos o tres opciones diferentes para poder completar un objetivo. Esta tercera entrega de Desperados es una precuela del primer juego, y enfoca su marco narrativo en los orígenes de John Cooper, que básicamente es el personaje principal en los títulos anteriores.
Entonces, el juego nos pone en control de este grupo de bandoleros, tienen hasta 4 habilidades cada uno, todas únicas, la mayoría bastante originales y sobre todo muy acertadas para sacar el mayor provecho de la jugabilidad. Vamos a desmenuzar un poco esto para que podamos darnos una mejor idea de cómo funcionan:
Cooper, el primer personaje que conocemos, su habilidad es el uso del cuchillo, que puede lanzar desde una distancia mediana, haciendo asesinatos silenciosos, también puede utilizar dos revólveres al mismo tiempo, es capaz de lanzar una moneda para distraer momentáneamente a otros, o para causar estragos con el ambiente (podemos tirar una moneda a un caballo, y cuando un guarda pase por detrás del caballito ¡pum!).
Mccoy, un excéntrico doctor que suele ganar dinero dando protección a otros, lleva consigo una maleta de cirujano que usamos para tirar al suelo, lo que llama la atención de los guardias para distraerlos, es un ágil francotirador con su revolver de cañón largo y mira telescópica. Tiene la habilidad de curar la vitalidad de sus compañeros, y es medio amargado.
Hector, quien menos modales tiene, pero es la fuerza bruta que nos ayuda a acabar con los más fuertes NPCs del juego. Hector carga una enorme trampa para osos, que coloca en el suelo, para usar su otra habilidad de silbar, y llamar la atención de guardas para que los pobres insensatos pisen su adorada trampa -incluso le tiene nombre, se llama ‘Bianca’.
Kate, tan hermosa que podemos usarla para distraer a los enemigos con sus encantos, pero para ellos, primero debemos hacernos con alguna pieza de ropa que Kate pueda ponerse como disfraz, también tiene un dispositivo que libera una fuerte fragancia que aturde a los enemigos dentro de un radio pequeño.
Isabelle, para mí, la mejor de todos, ella es una bruja con habilidades sorprendentes, como la de enlazar: ella tira un dardo a dos guardias que se verán unidos por magia, y lo que le pase a uno de ellos, le pasará al otro, una técnica buenísima para situaciones apretadas donde hay hasta cinco enemigos en una zona pequeña, también, puede controlar la mente de los demás, algo que ayuda montones para eliminar contrarios sin que suenen las alarmas.
Desperados hace muchas cosas bien, una de ellas es variar las misiones para que no tengamos que usar siempre a todos los personajes. Nos pone en situaciones donde a veces seremos uno solo contra todos, en otras oportunidades, vamos a ir con solo tres miembros del grupo, siempre varían, eso me agrada porque me hace pensar bastante encontrando nuevas formas de juntar las habilidades de aquellos que puedo controlar durante un nivel. Al final de cada pantalla vamos a ver un resumen de la misma, con la información relativa a asesinatos, logros, metas cumplidas, tiempo de juego, etc.
La jugabilidad en Desperados III es todo sobre el sigilo. Los que vengan esperando un título de tiroteos entre vaqueros no van a encontrar lo que quieren, pero aún así, si buscan eso, hay en pocas dosis, pero todas igualmente con aires de hacer las cosas con calma, a hurtadillas.
Los NPCs en cada nivel tienen un rango de visión que podemos ver al dar click derecho sobre ellos, cualquier cosa dentro de su ‘cono’ de visión en color verde uniforme, es lo que ellos pueden ver, lo que esté en un tono verde a rayas, pueden verlo, pero si estamos agachados, no nos verán (pueden ver el ejemplo en la imagen abajo). Entonces, podemos estar agachados en las áreas verdes a rayas sin ningún problema, pero si de alguna forma nos descuidamos entrando en su rango vigilancia, el color verde empezará a rellenarse de amarillo, esto nos da unos segundos para reaccionar y escapar a cubierto, pero si todo se torna amarillo completamente, sonarán la alarma, lo que básicamente significa la muerte, porque esto llama a otros secuaces que suelen estar en casas o edificios descansando.
Aquí es donde recuerdo mucho que la pasaba re mal en mi infancia jugando Comandos, ¡como lo odiaba ese juego!, lo bueno es que ya de grande soy capaz de hacer las cosas bien en Desperados. Ahora intentaré jugarlo en el modo Difícil, el cual trae NPCs más avispados generando un reto mayor.
Entonces, para sortear las líneas del otro bando, es obligatorio siempre usar el sigilo, empleando las técnicas ya mencionadas anteriormente de nuestros héroes. Con el ejemplo de la imagen abajo lo ilustro, en dicho escenario tenemos a tres trabajadores de la ferroviaria arriba en el centro, a mano izquierda, Cooper está listo para arrojar su cuchillo, mientras que a la derecha (en la parte verde a rayas) Kate está lista para arrojar su perfume, el cuál va a aturdir a los dos guardianes en el círculo pequeño, a la misma vez, Mccoy -a la derecha de Kate, está listo para correr e inyectar sus venenos a los cuellos de los dos pobres diablos. Realizar esta maniobra en el momento justo es vital, todo debe ser hecho a la medida justa para que los ojos de cualquier vigilante en los alrededores no capten nuestra acción.
Para poder realizar este tipo de acciones tan coreográficas, apretamos la tecla de shift para pausas el juego, dando el chance al jugador de asignar movimientos a los personajes. Entonces, arrojar el cuchillo, tirar la bomba aturdidora, y ejecutar a los dos enemigos fue mi movida en ese momento. Al presionar en el teclado enter, las acciones se llevan a cabo, si queremos, podemos pulsar shift de vuelta, para conservar las acciones, y ejecutarlas cuando sea más adecuado.
Lo explicado anteriormente, más las posibilidades de emplear el entorno a nuestro favor marcan la diferencia entre Desperados III y otros del género. Mucho en cada nivel se presta para nuestro favor, podemos empujar rocas gigantes para que aplasten a los NPCs, arrojar una enorme montaña de cajas de madera sobre ellos, o tirarles encima una pared gigante. No podemos olvidar los animales, que nos ayudan en muchas partes, si Cooper tira una moneda a un toro en el momento justo que alguien pasa frente a este, lo embestirá, posiblemente matándolo. Aunque, ojo eh, las gallinas pueden ser nuestras peores enemigas, ¡cuidado con ellas!
Sobre la jugabilidad no tengo quejas, es el juego de sigilo perfecto gracias a todo lo que podemos hacer, de verdad nos pone a pensar para encontrar la manera correcta de afrontar las situaciones, hacer uso de las habilidades del grupo de manera satisfactoria me hace sentir el rey del acecho. Juntar a los cinco miembros del grupo para hacer una sola jugada que acabe con varios enemigos simultáneamente no tiene precio. Desperados III es un juego de paciencia, estudio, y mucho, mucho guardar y cargar partida.
La historia logra narrarse de manera contundente, a pesar de ser un juego 100% isométrico, el desarrollador Mimimi logra dar en el clavo con el trabajo de actuación realizado para cada uno de los miembros de la banda. Siempre, previo o posterior a un nivel, se incluyen tomas de carácter argumental en el que nuestros héroes conversan sobre algo, se ponen de acuerdo para llevar a cabo un plan, o despiertan de una fuerte resaca tras haberse ido de fiesta como si el mañana no fuera a llegar. Esto último, es de las mejores cosas en Desperados III, los momentos de la historia que uno no se espera, las salidas tan graciosas, las situaciones tan chistosas en las que el equipo suele meterse le dan un toque distintivo que solo se hace más perfecto debido al trabajo de voces. Ya les dije que todo los que la banda dice, absolutamente todo, tiene actuación de vos? no hay una sola pizca de diálogo entre nuestros personajes que sea texto, eso me encanta.
Parte de la narrativa se enriquece mientras jugamos, no se limita a los cutscenes. Nuestros personajes suelen tener conversaciones conforme vamos abriéndonos paso en los niveles, hablan de cómo conocieron a otros miembros del grupo, conversan cosas relativas a la misión que están llevando a cabo, o hasta tienen competencias entre ellos para ver quién elimina más enemigos, y a lo largo de la pantalla, a según van despachando a los tipos malos, los escucharemos decir ‘3’, ‘8’, un momento divertido es cuando Hector lleva 11 bajas, pero al llegar al número doce grita ’13’, a lo que su compañero le responde ‘¡hey, te saltaste el 12!’, para mí fue un detalle súper vacilón, y le da mucho valor agregado al juego con este tipo de situaciones.
Una de las cosas que me encanta de Desperados III es que nunca dejamos de ver cosas nuevas en el juego, si quieren un ejemplo, puedo comentarles que ya después de dos capítulos (de al menos 6 horas cada uno) todavía seguía aprendiendo nuevas cosas para hacer, o el juego me mostraba nuevas mecánicas a tomar en cuenta, como en una misión donde Hector pasó una noche loca con la esposa del Sheriff, al despertar, me recomiendan tener cuidado, pues debido al suelo lodoso del ambiente, los enemigos podrían ver las huellas que dejamos al caminar, esto me hizo tomar precauciones extra, pues además de evitar ser visto, o la necesidad de esconder los cuerpos inertes de cualquier malhechor, tenía que tomar en cuenta también el tema de las pisadas en el lodo. A mí personalmente esto me engancha, porque evita que el juego se torne monótono, le da un refresco muy bueno a la fórmula que de por sí se siente variada a pesar de ir ya adelantado en el juego.
En lo que refiere a rendimiento, no hay absolutamente nada de malo, Desperados III es impecable, sin tirones, nada de pantallas congeladas, el juego nunca se cerró abruptamente. Los tiempos de carga son aceptables, debido al tamaño de los mapas, la cantidad de personajes en el mismo, y la cantidad tan grande de detalle en cada uno de ellos. De verdad se sienten locaciones o pueblos vivos, cada uno es diferente al anterior, podemos entrar a algunos edificios para tomar mejor posición de ataque, el trabajo en los detalles de cada escenario es magnífico.
Desperados III es una joya indie, tiene una buena rejugabilidad, porque siempre hay más de una forma de terminar una misión, podemos hacerlo usando un camino u otro, sin matar a nadie, o eliminando a todos, las variables están ahí, y el desarrollador hace su trabajo proponiendo retos extra que podemos ver al final de cada misión.
La historia buena, y se engrandece en mayor forma gracias a las voces (que no me voy a cansar de mencionar) actuadas para cada personaje, es como ver una película de vaqueros cada vez que hay alguna secuencia de conversaciones. Igualmente su jugabilidad es impecable, es un juego perfecto, y la espera por él valió la pena.
Actualmente el título tiene la mayor nota posible entre la comunidad de jugadores de Steam, a este momento más de mil personas le han calificado de Overwhelmingly Positive, dando fe de que estamos ante un juego excepcional. De momento, tiene un precio de $45 USD, y tiene unos requisitos mínimos de procesador 3.0 GHz Dual Core (Intel i3-530 / AMD Athlon II X3 460), 8 GB RAM, una gráfica Nvidia GTX 560 / Radeon HD 5850, y espacio de 20 GB en el disco duro.
