Es común que, cuando se anuncia un proyecto “live-action” basado en manga/anime, los fans se preocupen, pues existen amplias posibilidades de que el “tratamiento hollywoodense” termine opacando su esencia, sin embargo, Adam Wingard (director) asegura que Death Note está “sana y salva”.
“Podemos hacer lo que queramos, y para mí es importante mantener las temáticas adultas, así que pueden esperar desnudos, malas palabras y una buena dosis de violencia”, expresó Wingard durante una entrevista para Collider.
Esta nueva adaptación de Death Note, cuyo manga fue escrito por Tsugumi Ōba e ilustrado por Takeshi Obata, está siendo producida por Netflix, esto luego de que varios estudios, considerados en la industria como «gigantes», no la colocaran como una prioridad. La historia de Light Yagami ya fue llevada a la pantalla chica a través de un anime dirigido por Tetsurō Araki.
“Recuerdo que, cuando era pequeño, veía los anuncios de Akira y siempre estaban acompañados por la advertencia de que no era apta para niños, y sin duda alguna eso me marcó, por eso quiero mantener Death Note fiel a su esencia”, agregó Wingard.
El director fue respaldado por el productor Roy Lee, quien señaló que “no es posible que esta película obtenga una calificación más baja que R”. Death Note comenzó a filmarse en junio, con la participación de figuras como Nat Wolff (Light), Keith Stanfield (L) y Willem Dafoe (voz de Ryuk), y su estreno está programado para 2017.
