Dijo una vez Steve Jobs parafraseando a Picasso que los grandes artistas copian y los mejores roban, y si nos vamos por esa línea podemos afirmar que Salt and Sanctuary es un plagio y uno muy bien hecho.
Una breve reflexión para los créditos finales de Salt and Sanctuary, un título desarrollado por Ska Studios que emula o copia, ¿plagia? muchas, muchísimas cosas de la saga de Dark Souls y las traspasa a una experiencia 2D. El resultado final es un juego que tiene todos los méritos para estar en nuestra biblioteca, una experiencia gratificante llena de laberintos, monstruos intratables y un mundo vasto que que pondrá constantemente a prueba al jugador. A pesar que las bases de Salt and Sanctuary imiten los aciertos de una saga consolidada no se puede dejar de señalar que el juego es un baluarte en diseño de nivel, combate y enemigos. El juego tiene una duración aproximada de 30 horas y una tonelada de razones que incitan a la rejugabilidad.
Inicié mi aventura en Salt and Sanctuary esperando un juego que emulara la esencia de Dark Souls, combate exigente y brutal, exploración en suelos hostiles y un ingenioso diseño del nivel que conecta la topografía del mapa con túneles, elevadores, pasadizos. El juego desarrollado por Ska Studios cumple con la esencia creada por Hidetaka Miyazaki, pero en Salt and Sanctuary no se queda en eso y aporta su estilo propio logrando lo que títulos como Lords of the Fallen y Bound by Flame fallaron estrepitosamente .
Enumeramos los aspectos en los Salt and Sanctuary imita a Dark Souls: Se puede de subir de nivel o comprar objetos con sal. La sal tiene un papel idéntico a las almas en Souls, cada vez que el jugador muere la sal quedará en el punto donde murió y si nuestro personaje es asesinado por un enemigo este se dejará la sal y se hará ligeramente más poderoso. Si el héroe muere sin reclamar la sal que dejó atrás esta se perderá para siempre.
Los checkpoints en lugar de bonfires son santuarios y son puntos estratégicos donde el jugador podrá subir de nivel y reabastecer el arsenal. Cada santuario se podrá personalizar, con herreros, guías, mercenarios, clérigos, líderes, alquimistas lo que da la opción al jugador de moldear sus guaridas que serán puntos vitales en la exploración de un mundo enorme custodiado por bosses. Cada boss tendrá su mecánica especial y algunos prometen un desafío digno de ser recordado.
Ska Studios no se limitó en solo copiar eso sí, el estudio independiente puso ciertos aportes en la mesa para crear desafíos de plataformas que remiten a las mejores épocas de Castelvania y a medida que se desbloquean nuevas habilidades estas serán puestas a prueba para entrar a nuevas áreas método que Metroid perfeccionó en la década de los 2000. Las pruebas de plataformas son ingeniosas y prometen un gran nivel de gratificación cuando se llega a un punto seguro sin que nuestro héroe sucumba a la gravedad.
Además la personalización del personaje es impresionante, Ska Studios no se anda con rodeos y nos presenta un algoritmo gigantesco con un millar de posibilidades para crear como queremos hacer nuestro personaje haciendo posibles builds de arqueros, guerreros, magos, espadachines incluso un híbrido entre varias clases. Dicha variedad deja la puerta abierta para la rejugabilidad.
El título hace muchas cosas bien pero también falla en su acabado estético, las texturas se ven pobres y el fondo es el mismo en muchos escenarios, la música se vuelve repetitiva después de horas frente a la pantalla. En muchas ocasiones es mejor poner un playlist de fondo, un playlist agradable…. Como el de Dark Souls con Nameless Song. También peca en su en el desarrollo del guión que sigue la misma narrativa de Souls que cuenta una historia a través de la construcción de niveles y la descripciones de los objetos. Hay historia sí pero es floja y sencilla, también se nota que hicieron el juego y después nombraron a los villanos casi que aleatoriamente… ¿A quién se le ocurre bautizar a una hechicera como La bruja del Lago?
Salt and Sanctuary hace un excelente trabajo en pasar todas las ideas de la saga de Souls en un videojuego de dos dimensiones, esta obra se encuentra en la intersección de Dark Souls y Castlevania y puede pecar de originalidad pero eso no lo convierte en un mal juego, es más, Ska Studios logró copiar lo mejor de las sagas y regalarnos un título poderoso lleno de momentos memorables que nacen a partir del combate y la exploración. Sin lugar a dudas Salt and Sanctuary merece un espacio en la biblioteca de cada jugador de RPGS.
Lo bueno
Excelente diseño de niveles
Combate agresivo y exigente
Peleas memorables
Lo Malo
Poca creatividad en la historia
Pobre acabado gráfico y musical
Precio
$17 Disponible solamente para Play Station 4.
