Reseña: Shingeki No Kyojin Temporada 2, Episodio 6 y 7

Episodio 6

Todo está relacionado, así podríamos definir este capítulo (6) que no ha hecho otra cosa que sacarnos suspiros de las tensiones creadas para los espectadores, y es que al final todo vuelve al inicio, todo regresa a la caída de la muralla y todos están involucrados, con ustedes la reseña sin spoilers de este capítulo.

Luego de enterarnos de que Y’mir  es una titán (vaya sorpresa), encontramos al equipo de exploración realizando la tarea de mantenimiento y rescate mientras nos damos cuenta de quiénes y como iniciaron toda la historia del anime. ¡Sí! En este episodio sabremos quiénes fueron los que destruyeron la Muralla María desde el primer episodio; cabe resaltar que la construcción del conflicto a este punto se antoja muy elaborada, sin embargo, no puedo obviar el desazón que me produjo la construcción de esta escena.

Es decir, todo el conflicto construído alrededor de  más de veinte capítulos tiene su momento cumbre acá, en este episodio y de pronto se siente como si solo sucediera, como si todo estuviera perdonado y ya luego somos «amiguis». Luego de eso viene un flashback  que intenta remediar la situación y dar coherencia a la presentación del desenlace, pero ni con esa escena se arregla lo flojo que se siente este punto del capítulo.

Tuvimos buenas animaciones, peleas interesantes y Eren demostrando porque es el protagonista más parecido a Frodo  que existe en un anime (si vieron el Señor de los Anillos entenderán la referencia); Mikasa como siempre demostró porque es mi favorita (junto a Levi) y Armin dio los argumentos de ser uno de los mejores estrategas con los que cuenta la humanidad en este momento.

Fuera de todo lo anterior este episodio no logró superar al anterior y quedamos no con dudas (lo que se hubiese agradecido) sino con un sabor amargo que poco o nada puede compensar sólo otro capítulo que nos muestre un conflicto mejor construído.

Episodio 7

Lo mejor que se ha hecho desde que inició la temporada, luego de presentarnos un conflicto de una forma un poco extraña tenemos esta joya de capítulo que detallaré a continuación tratando de no hacer spoilers como siempre.

Luego de la revelación en el episodio 6 de la identidad del titán acorazado y el titán colosal vemos una pelea encarnizada en donde por primera vez sentí una empatía real por el inepto de Eren. Y es que al parecer por fin el protagonista entendió su papel en el mundo y decide hacer algo al respecto.

La pelea consume casi todo el capítulo y se agradece, la animación de las peleas, los motivos y el sentimiento que transmite es indescriptible, la estrategia y la inteligencia de la pelea hacen que todo sea creíble. La estática se rescata muchísimo y en general es de lo mejor en estas dos temporadas que llevamos.

Fuera del motivo principal y la resolución del conflicto el capítulo estuvo muy bien trabajado y se convirtió en uno de los indispensables de toda la serie.