¿Se acuerdan de Alf? ¡Volvió! En forma de fichas, y ahora también lo hizo Castlevania con una serie animada de Netflix, con solo 4 capítulos en total para su primera temporada ya la serie esta casi totalmente consagrada en el canon de la saga para los fans. Naturalmente, The-Couch ya hizo su crítica de la serie con gran aclamación.
Luego de terminar esta primera entrega de la serie de Castlevania, por una razón que no podía comprender, recordé un discurso de Reggie Fils Aime en su infame presentación del E3 en 2008, Reggie dijo esto luego de presentar Animal Crossing City Folk para Wii, lo cito: “Todavía hay decenas de millones de personas alrededor del mundo listas para meterse al juego que todos nosotros amamos, y al mismo tiempo hay millones de personas como nosotros, jugadores veteranos, hambrientos de saber que sigue”.
La retórica de Reggie en su momento tengo que decir que fue bastante impresionante, con los años he afinado un poco mi oído para darme cuenta de cuando un discurso es llamativo, y Reggie en todo momento lo fue, lástima que las conferencias del E3 no se juzgan buenas o malas por la calidad de la presentación, de ser así Nintendo habría ganado por avalancha en aquella oportunidad.
Más pronto que tarde me di cuenta que recordé ese discurso porque muchos de nosotros NO esperamos ese juego que todos amamos, ni tenemos expectativas serias de obtener uno nuevo en su saga, estoy hablando de un Castlevania al mejor estilo de los clásicos. Hemos visto con descontento e ironía lo que hace Konami como la empresa dueña de Castlevania y otras sagas de juegos, máquinas Pachinko y pésimas remasterizaciones, pero seguimos impotentes y frustrados por la situación.
El milagro de Netflix y un equipo de animación reputable haciéndose con los derechos para producir esta exquisita serie me hace pensar en como fue necesario sacar la saga del medio de los videojuegos, transportándola a la pantalla chica para darle vida nuevamente. Aquí el punto no es como se dio ni por qué, pero lograron, por increíble que suene, lo lograron.
Teniendo claro que bien pudieron haber obtenido los derechos para explotar series consolidadas como Resident Evil o Street Fighter, por ejemplo, decidieron apostar por una saga de horror y fantasía gótica como Castlevania, contrario a la creencia en ciertas esferas donde se considera que todo lo que salga del “mainstream” es una inversión peligrosa y no recomendada. La reacción de la audiencia con esta serie debería ser suficiente para replantear toda esta situación.
Actualmente hay un mercado para el horror y la fantasía gótica, así como lo hay para el horror psicológico y el suspenso, creo que no hay terreno más fértil que el de hoy para que Netflix y Federator Studios busquen hacerse con los derechos de Silent Hill -¿Quizás eso este pasando en este momento?-. No sería de extrañar que intentaran replicar el éxito obtenido con Castlevania ahora con Silent Hill.
La tragedia de Dracula, Lisa, Alucard y el desdichado sucesor de la familia Belmont a cuya generación le toca enfrentar a Dracula, no son tan fáciles de capturar ni de adaptar, los matices filosóficos de la saga son muy profundos y el potencial que hay para explorarlos es casi ilimitado, pero ya todo esto lo vemos desarrollado con el rol antagónico que da la serie al clero católico y la personalidad que tiene cada personaje; los productores y escritores saben bien lo que están haciendo.
Silent Hill es una materia prima perfecta para los creadores de la serie, el mundo pagano y sobrenatural que sobrecoge al pueblo y a los pobres desafortunados que acaban por entrar a él, la conspiración por revivir a un Dios pagano, la simbología ocultista y sus metáforas visuales, e inclusive los conflictos internos de los personajes (como lo observamos en Silent Hill 2) son una oportunidad para crear otra obra maestra.
Todos los anteriores ejemplos serían una magnífica inspiración para darle vida a un nuevo juego, o como he venido diciendo, una nueva serie ya que todos los recursos existen para este último escenario. Es más que plausible volver a contar una vieja historia en el universo de Silent Hill o traernos una nueva.
Al igual que en el caso de Castlevania, las criaturas y sus significados, así como la personalidad establecida por canon para los personajes se bastan para poder imaginar a un nuevo visitante al pueblo de Silent Hill, uno que venga cargando su propio infierno personal o que por causas aleatorias tenga que sobrevivir al que otros hayan creado; pensemos en el nuevo Trevor Belmont.
Mi única preocupación seria que en el caso de Silent Hill la música y la construcción de la atmósfera de la saga se lograron a través de una ingeniería sonido nunca antes replicada, y fueron el alma de la serie.
El músico Akira Yamaoka fue quién dio a Silent Hill la esencia verdaderamente perturbadora a las imágenes que por sí solas no habrían dado tanto miedo. ¿Sería posible traer de vuelta al maestro compositor? Se vale soñar.
La compositora Michiru Yamane hizo lo propio con Castlevania, su música gótica es algo increíble y excepcional, por contexto les rogaría que escuchen esta pieza de Castlevania “El Lamento de la Inocencia” (PS2), porque para muestra un botón (como Alf).
No menosprecio de ninguna forma el trabajo de Yamane, pero considero que en general la música gótica o con influencia del género resultan mucho más comunes que la creación de verdaderos sonidos de horror y suspenso puros, así como la música que los acompaña, y si el que consiguió hacerlos prácticamente es único en su clase ¿Por qué no aprovechar nuevamente su trabajo? Sería lo más conveniente, casi completamente necesario.
No me hizo tanta falta la música de Yamane en la serie de Castlevania como creo que extrañaría la música de Yamaoka en una eventual serie de Silent Hill. Este era el punto al que quería llegar, por eso mi gota de preocupación en un mar de optimismo.
Ya sabemos que los encargados de Castlevania tienen talento para hacer un guión digno y fiel al material originario, y que saben desarrollar personajes de manera tal que ningún fanático acabe ofendido, entonces digo, ahora sigue Silent Hill por favor.
Lo lógico para hacer después de Battlefield One, es Battlefield Two, por World War TWO que viene después de World War ONE, lo sensato de hacer luego de concluir una serie de Castlevania es hacer una de Silent Hill, van siempre de la mano como en la parte trasera del manual de Castlevania Lamment of Innocence, no deberían separarlos.
Este fue un artículo de Álvaro Pérez, conocido como SuaveSpyMojo, para The-Couch.
