Little Big Workshop es un título independiente desarrollado por el estudio Mirage Game Studios, que a su vez lo publica la gente de THQ Nordic. Podemos resumir que LBW es un juego en el que manejamos nuestra propia fábrica, gestionamos el personal, los proyectos de manufactura, mientras que hacemos crecer nuestro negocio de un pequeño taller, a una enorme empresa.
Al menos desde el inicio, con sus visuales tan bonitas y animaciones adorables, pensé que mi camino en Little Big Workshop sería diferente. Lo digo en el buen sentido, puesto que cuando entramos por primera vez a este juego de manejo y gestión, su estética nos engaña pensando que va a ser pan comido, pero en realidad, el camino hacia el triunfo en el mundo de las fabricas es largo, trabajoso, pero sobre todo de mucho prueba y error al comienzo.
Recuerdo que en mis primeras horas todo se volvió una lucha constante por no caer en bancarrota. Al menos unas diez veces tuve que vender mobiliario que había adquirido previamente, esto, porque al ver que en mi cuenta bancaria el dinero era aceptable, no contaba con que los proyectos en los que metía a mi compañía eran más caros de lo que hubiese pensado. Y es que ese planeamiento fue lo que no supe entender al inicio.
Digamos, en Little Big Workshop tenemos una cantidad determinada de empleados, estos hacen sus labores en estaciones o mesas de trabajo. Entonces, si mi siguiente proyecto es crear un grupo de 10 mesas para un cliente, hay que tomar en cuenta: primero, el tiempo que tardaremos en hacer este proyecto, segundo, el dinero que pagaremos en salarios durante este lapso, tercero, el costo de los materiales y otros gastos que suelen salir en el camino. Entonces, si al iniciar un trabajo en el que gastare 5 mil monedas contando los salarios (se gastan paulatinamente con el pasar de los días) y materiales (se gastan al comenzar el proyecto), pero en mi cuenta de banco solo tengo 4 mil monedas, ya empecé mal. Lo idóneo es, al inicio, comenzar con trabajos pequeños, que me permitan salir tablas con las cuentas. Para que eventualmente cuando logre tener mejor presupuesto, pueda embarcarme en trabajos mayores.
Planear bien a futuro es primordial, pues los bienes suelen bajar o subir de valor con el tiempo, y si calculamos ganar un porcentaje ‘X’ al vender la mercancía, podríamos estar en problemas si el mercado para dicho articulo ha bajado durante la semana anterior y el tiempo que nos toma realizar las mercancías. Todas estas cosas son importantes de tomar en cuenta para no perder dinero. Para esto, tendremos un gráfico que nos permite determinar como se va a comportar el mercado en el futuro.
Tanto trabajo va a hacer que nuestros trabajadores sientan cansancio. Para evitar que se desmayen en medio de alguna labor, tenemos que crear zonas de descanso, para que ganen energía y puedan irse a laborar con normalidad. Tener muchos empleados con pocos servicio para el reposo, generara tiempo de producción perdido; el tiempo es dinero en Little Big Workshop.
No estaremos solos en nuestro viaje a la cúspide de los negocios. Un menú muestra nuestra posición en una lista que recaba información de las mejores compañías del mundo. Claramente comenzamos desde el fondo, vamos subiendo escalones en relación a nuestras ganancias y el valor de la empresa. Aquí, entra el único punto molesto del juego, pues el magnate que ostenta el primer lugar en esta lista pasa llamando por teléfono para burlarse de nosotros o mostrar su sufrimiento al ver que nuestra compañía emerge. Lastimosamente estos eventos pausan el juego cuando contestamos, y si no contestamos, el teléfono no para de sonar; son eventos divertidos las primeras dos veces, pero el resto del tiempo ya realmente molesto.
La jugabilidad se torna profunda cuando toca planear un diseño, siempre que decidimos empezar un pedido de algún producto, entramos en la fase de planeamiento, un plano de las diferentes partes del ítem se muestra en un plano azul, y desde esta vista debemos seleccionar los materiales (plástico, metal, madera, telas) que van a conformar el objeto. A su vez, es necesario asignar las estaciones de trabajo que van a llevar a cabo el proceso. Esta es la parte interesante, pues debemos escoger bien la mejor manera de hacer todo de la manera más efectiva (para ahorrar dinero/generar ganancias).
También, podemos hacer crecer nuestro edificio. Comenzamos con un pequeño cuarto junto a una zona de descanso, pero podemos ir haciendo la infraestructura más grande, para dar lugar a mejores maquinarias que permitan hacer los trabajos en madera con mayor rapidez. Al inicio nos fue un poco complicado emplear la mecánica de construcción de paredes y puertas, pero rápidamente entendimos la forma en que funciona.
Existe un pequeño bug con el Vertical Sync, que se reinicia cuando cerramos y abrimos el juego, por lo que cada vez que vamos a jugar toca ir a las opciones para volverlo a activar. Por demás, no encontramos otro problema técnico en Little Big Workshop.
Con muchas cosas buenas, cosas malas casi nulas, Little Big Workshop es una sorpresa en todo sentido: adictivo hasta decir basta, profundo en su manejo y gestión de los proyectos, con un estilo visual hermoso y un sistema de progreso medianamente desafiante. Recomendado para todos los jugadores, pero el doble recomendado para los amantes de juegos de simulación como Factorio, Autonauts, o el mismo Satisfactory.
Actualmente, Little Big Workshop tiene un precio de $19 USD, se encuentra disponible para PC, y cuenta con casi 200 opiniones de usuarios en Steam que le dan notas de Mayormente Positivos.
